ACEPTACIÓN
Prefiero la frustración a la resignación. La resignación tiene un carácter más doloroso, más eterno, más devastador.
La frustración en cambio tiene campo para la resiliencia (palabra tan de moda desde la pandemia), tiene una gestión, un nuevo intento, y otro, y otro más, y así hasta el infinito.
En cambio creo que el aprendizaje más costoso es el de la aceptación, aceptar que nos hacemos grandes, que nuestra piel se descuelga, que nuestros padres actúan como niños, aceptar lo ilógico, aceptar el camino de un hijo, su condición, aceptar.
Aceptar que a nuestro compañero no le apetece lo mismo.
Aceptar el préstamo de la vida y disfrutarla.
Aceptarnos a nosotros mismos como humanos frágiles.
Aceptar. Aceptar.
Sinceramente aprender aceptar me ha hecho un poco más feliz.
Hugo Styglitz
«Aceptar», una palabra tan corta, tan rápida de leer, de decir, de pronunciar, tan difícil de cumplir, de entender…..
«Aceptar» , que la vida pasa, que no eres el niño que jugaba y se sentía protegido por sus padres, ahora eres tu quien debe proteger, quien debe cuidar, y Aceptar que t haces mayor, que adquieres responsabilidades, en ocasiones es una losa muy pegada, asi que lo mejor que podemos hacer es tratar de hacer todo mas facil, no dar tanta importancia a cosas irrelevantes, y simplemente, «Aceptar», que la vida pasa y hay que tratar de ser feliz, solo tenemos una vida